Mujeres que inspiran a otras mujeres: Día internacional de la mujer


    El 8 de Marzo, fue el día esperado para muchas mujeres en Pasto, porque se realizó la movilización en conmemoración del Día Internacional de los derechos de las mujeres. Este día se convirtió en un espacio de expresión para todas ellas.

    El parque de Santiago fue el lugar en donde poco a poco empezaron a llegar distintas mujeres, con el ánimo de lucha y de levantar su voz; Eran las nueve de la mañana y cada vez llegaban más, listas con diferentes carteles, camisas de color violeta, tambores, pañoletas, entre otros. Algunas de las personas que llegaban al encuentro, expresaban que no es una fecha para desear un “Feliz día” sino para conmemorar a aquellas mujeres que han luchado, que se han ido, y por las que llegan, es un momento para tomar conciencia de la lucha que como mujeres llevamos día tras día en una sociedad machista.

    Este evento crecía a medida que pasaba el tiempo, al principio parecía que eran pocas las personas que llegarían al lugar, pero sin duda alguna, era una fecha tan importante que las mujeres pastusas y de algunos municipios de Nariño, no lo iban a pasar por alto. Distintas organizaciones y entidades comenzaron a reunirse y a preparase, aun en medio de la lluvia las personas esperaban ansiosas la marcha.

    Aproximadamente a las 10:30 de la mañana, organizaciones de la sociedad civil como Articulación feminista por Nariño de la cual hacen parte Batucada Empoderada, Corporación Ocho de Marzo, Unidas para Avanzar, Fundación Artetra, Guaneñas Feministas, Mujeres Nariñenses por la Paz, ASMUPAZ, ADIV, AMUDH, entre otras, así como organizaciones de mujeres trans, mujeres migrantes, comunidad en general y algunas instituciones, se organizaron en las calles para dar inicio a la movilización. En el lugar también se encontraban distintas fotógrafas-os que registraban con retratos y entrevistas el evento.

    Esta marcha fue el encuentro de varias mujeres, que, aunque luchaban por diferentes causas que preocupan a las mujeres, todas tenían algo en común: “la exigencia de sus derechos y la necesidad de un mundo libre de violencias”. Algunas entre cánticos, arengas y la música vibrante de la batucada, expresaban su inconformismo ante la opresión, la violencia machista y los feminicidios, otras alzaron su voz por el derecho a una educación gratuita y de calidad, por oportunidades de trabajo, por su participación política etc.

    El recorrido de la movilización inicio en el Parque de Santiago, siguiendo por la Avenida Boyacá, Avenida de las Américas y finalmente en la Plaza de Nariño. La marcha en medio del camino realizó varias paradas con el fin de visibilizar su lucha, poder ser escuchas no solo ante el gobierno, sino ante las personas que pasaban y miraban desde las calles o ventanas de sus casas. En aquellas paradas las y los fotógrafos se desplazaban rápidamente para capturar los momentos con más fuerza, más expresión y decisión. Las voces de las mujeres eran acompañas de música, gritos, saltos, coreografías, bengalas de humo, banderas, entre otros, de esta manera llamaban mucho más la atención de la ciudadanía. De igual manera se presentaron pequeños momentos de apoyo de las personas que circulaban en la ciudad, demostrándolo con un saludo, una palabra, gestos, también con fotos y algunos videos.

    Cerca de las dos de la tarde la manifestación estaba por terminar, las integrantes de la marcha ya ubicadas en la Plaza de Nariño extendieron sus carteles con mensajes de protestas, con el fin de que sus exigencias y peticiones sean escuchadas por los entes gubernamentales, medios de comunicación y distintas organizaciones que apoyan su causa.

    Finalmente, esta marcha concluyó con un círculo de mujeres, a partir de un mandala hecho con flores, sahúmos, banderas de la lucha feminista y carteles que expresaban el sentir de las mujeres. Se entonaron canciones haciendo alusión al sagrado femenino y recordando la conexión de las mujeres con la tierra. Fue un momento de tranquilidad y de emoción al poder compartir entre mujeres, ese espacio también fue propicio para la toma de algunas fotografías memorables y entrevistas acerca de la experiencia en la marcha y de testimonios que quedarán guardados para demostrar que la lucha de las mujeres en contra de la discriminación y la violencia, y a favor de la paz, la inclusión y la reivindicación de sus derechos, es cada vez más fuerte.

    Por Catalina Erazo.

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